El manga más lento del mundo: Una fuerte protesta que avanza despacio

En un mundo donde los contenidos se deslizan a toda velocidad —entre notificaciones, series que se maratonean en un fin de semana y videos que duran apenas segundos— existe un cómic que decidió apostarle justo a lo opuesto. Su título es 「1年で1ページだけ進むマンガの世界」, traducido como «El mundo del manga que avanza una sola página por año». Sí, leíste bien: una única página, cada año.

En tiempos donde todo parece exigir rapidez, esta obra se convierte en un recordatorio de que no todo arte necesita correr para existir.

El creador de esta propuesta es Kidoljirō (木戸次郎), un mangaka japonés que sorprendió en 2019 al publicar la primera página de este experimento narrativo (Mynavi News, 2020). Su planteamiento fue tan sencillo como radical: publicar solo una página de manga por año, sin importar cuánto dure el proyecto.

La idea nació casi como un juego. En una entrevista, Kidoljirō confesó que ni siquiera estaba seguro de seguirlo después de la primera entrega:

«Para ser sincero, ni siquiera lo recuerdo bien… Pero yo mismo tengo expectativas sobre qué haré el próximo año» (Mynavi News, 2020).

Y desde entonces lo ha cumplido. Cada 27 de febrero, una nueva página de este cómic aparece como un pequeño ritual que da continuidad a la historia más lenta del mundo.

Primera página del manga «El mundo del manga que avanza una sola página por año», traducido al español
Fuente NovelCool

El fino arte de esperar

El contenido del manga es deliberadamente mínimo. En la primera página aparece un caballero con espada, murmurando «Plan fallido». La segunda página, un año después, incluye una línea meta en la que el personaje pide: «¡Cuida de que yo me acuerde del próximo año!» (ITmedia News, 2020).

El efecto es extraño y encantador. El relato no avanza en el sentido tradicional, pero sí despierta preguntas y conversaciones. El público sabe que no habrá respuestas rápidas, y justamente ahí radica el atractivo: es una experiencia que obliga a esperar, a reconocer el tiempo.

En Japón, la obra ha sido recibida con humor y curiosidad. Algunos la llaman «el manga más lento de la historia», mientras que otros lo siguen como si se tratara de una cita anual.

En foros internacionales, la reacción es similar. Un usuario en Reddit resumió así la experiencia:

«Es una serie divertida a su manera y merece la pequeña atención que recibe cada año» (Reddit, 2023).

Otro comentó con ironía:

«El tiempo vuela, ¿no? Al menos ya tenemos más páginas que Hunter × Hunter en los últimos años» (Reddit, 2023).

Más allá de la broma, estos comentarios muestran cómo la lentitud se convierte en ritual, un recordatorio de que el manga no siempre necesita ser devorado.

Aunque Kidoljirō nunca lo enuncia con agresividad, su obra es también un comentario hacia la industria del manga japonés, famosa por las duras condiciones de trabajo. La mayoría de mangakas enfrentan jornadas inhumanas, con plazos semanales absurdos que comprometen su salud y su vida personal (Saikyō Jump, 2023), algo ya bastante precario en la cotidianidad de Japón.

En contraste, 「1年で1ページだけ進むマンガの世界」 desafía ese modelo: un manga sin prisa, sin plazos imposibles, sin desgaste extremo. Su existencia plantea una pregunta sencilla pero poderosa: ¿y si bajarle a la velocidad también es una forma de cuidar el arte y a quienes lo crean?

En la industria del manga, la pasión por contar historias suele llevar a sus creadores a un peligroso desgaste físico y mental
Fuente YouTube- Cortesía Anime Culture Corner

Los jóvenes opinan

Una de las sorpresas del proyecto es que muchos jóvenes han abrazado este cómic con entusiasmo. Lejos de verlo como una broma pasajera, han encontrado en él un espacio para debatir y reflexionar. En comunidades digitales, se preguntan por el sentido de esperar un año para una página, por la naturaleza del tiempo en la narrativa y por la relación entre autor, lector y obra.

Este detalle confirma algo importante: los jóvenes son consumidores activos. Son irreverentes, sí, pero también inteligentes y curiosos. Un proyecto así no se burla de ellos, sino que los invita a pensar y a conversar.

El propio Kidoljirō lo ha descrito con sencillez: «cada página es como una hoja que crece una vez al año. No hay garantía de que el proyecto llegue a “completarse”, pero ese no es el objetivo. Lo importante es el gesto: sembrar un árbol narrativo que quizá otros leerán en el futuro» (Livedoor News, 2020).

Tal vez los lectores nunca veamos el final de su manga. Quizá en el próximo siglo alguien hojee todas las páginas juntas y complete el rompecabezas; pero la magia está en la espera, en el legado intergeneracional, en la idea de que una historia también puede ser heredada.

Lectores de manga en una tienda de Japón
Fuente Story Relm- Cortesía Danny Choo

Resonando más allá del manga

En última instancia, 「1年で1ページだけ進むマンガの世界」, «El mundo del manga que avanza una sola página por año», nos recuerda que ralentizar no es perder, es resistir. Es una obra que lanza un mensaje a varias audiencias:

  • A los lectores: que el disfrute no siempre está en la inmediatez.
  • A los creadores jóvenes: que hay espacio para experimentar sin desgastarse.
  • A la industria: que el manga no debe ser una trituradora de talento, sino un espacio creativo donde el tiempo también es un recurso artístico.

En un mundo que grita ¡lo quiero para ayer!, Kidoljirō responde con un suave: no hay prisa.

Su cómic no solo es la historia más lenta del mundo: es también una invitación a recuperar el tiempo, a cuidarnos, a recordar que cada página —aunque llegue una vez al año— puede ser suficiente para generar conversación, expectativa y asombro.

Quizá en el futuro alguien herede una colección de treinta páginas y la lea como un tesoro. Ese será el triunfo de este experimento: demostrar que la espera también es una forma de disfrute.

Kidoljirō nos demuestra que el crear cómics es un disfrute en sí mismo, una experiencia única que permite idear vastos universos con herramientas de fácil acceso. En HacheComics te enseñamos a crear tu propio cómic desde cero, no importa el nivel que tengas. escríbenos y atrévete a mostrar tu arte al mundo.

Oscar Hernández «Hache» dictando un taller relámpago de cómic
Fuente Archivo Particular

Referencias