Laura Guarisco en el «Nido» del Premio Nacional de Novela gráfica 2024

Yolanda Santa RudasNovember 5, 2024

Su propuesta artística resalta el papel del inmigrante en la resignificación de la novela gráfica en contextos socioculturales más actuales y pertinentes.

La novela gráfica «Nido (Editorial Planeta, 2023)», de la escritora colombiana Laura Guarisco, recibió de las manos del Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes el Premio Nacional de Novela Gráfica 2024, lo cual constituye un orgullo para los artistas, un sentimiento de empatía hacia el dolor del inmigrante y un reconocimiento a la armonía existente entre el cómic y los trazos dentro de esta pieza narrativa.

Cabe resaltar que, por primera vez en la historia, Colombia alberga un profundo agradecimiento hacia una novela gráfica, pues esta protege los 100 años del cómic nacional bajo las alas de los sentimientos de empatía y solidaridad inmersos dentro de una apasionante capacidad creadora en la que convergen las imágenes y las letras.

¿De qué se trata la novela gráfica «Nido»?

Ángel, un joven venezolano emprende la búsqueda de un nuevo hogar en un país diferente al suyo, pues en su tierra natal se vive una situación política, económica y social bastante crítica.

Durante el trayecto hacia un nuevo país, el protagonista se ve obligado a sufrir diferentes problemáticas que actualmente millones de inmigrantes han estado viviendo a través de la historia; problemáticas como la xenofobia, la falta de oportunidades, el hambre, el miedo de habitar un país desconocido, la nostalgia de su tierra natal, entre otras, son abordadas en este apasionante relato.

La obra crea un espacio que posibilita el encuentro armónico entre elementos sociales reales y el mundo fantasioso de la mente de la autora, lo cual permite que el lector se deleite con la propuesta estética, ociosa y/o  de esparcimiento mientras se reflexiona sobre la responsabilidad social que tenemos frente a la problemática migratoria.

Páginas internas de la novela gráfica «Nido», de Laura Guarisco.
Fuente: Revista Blast. (2023).

La nueva de la clase en el Nido colombiano

La obra plantea que ser nuevo o nueva de la clase implica ser el blanco de miradas, gestos palabras o acciones de los compañeros de clase y realizar acciones en torno a la recepción de ello. Es asi como, por ejemplo, el solo hecho de salir a caminar y sentirse observado es una situación que la mayoría de seres humanos ha vivido con cierta incomodidad en alguna etapa de su vida, lo cual lo sumerge en un riesgo latente de crear o recibir oportunidades de herir susceptibilidades, sanar heridas o crear experiencias felices. Dicho planteamiento crea un vínculo con sus lectores, quienes, en un suspiro de gratitud, se sienten identificados con ella.

Un ejemplo de lo anterior se sitúa en las siguientes palabras de uno de sus lectores: «Un libro que toca la fibra emocional, no solo si eres venezolano, si has tenido que salir de tu país por fuerzas mayores y atravesar situaciones difíciles (…)» (Comentario en la página web Buscalibre, 2024 ). Además, otro lector afirma que dicha lectura es «increíble experiencia». (Comentario en la página web Buscalibre, 2024) Lo común entre la opinión de estos y muchos otros lectores es que la el texto proporciona una experiencia que integra emociones de sensibilidad y comprensión al evocar situaciones similares a las vividas por Angel, el protagonista de la historia, pues los devoradores de esta historia describen en las reseñas la existencia de una conexión emocional con el libro que nace con el sentir una nostalgia compartida y un dolor que aflora durante la lectura.

La joven venezolana Laura Guarisco retrata en Nido parte de su vida | Foto Adreina Mujica.
Fuente: El Pitazo. (2024).

Teniendo en cuenta lo anterior, la escritora explora la importancia, aunque en mayor dimensión, de reconocer a los nuevos de la clase en este país: los inmigrantes; personas que, además de los elementos mencionados, han tenido que abandonar proyectos de vida, posesiones luchadas y atesoradas, familias, parejas, amigos e incluso dinero con el que contaban para alimentarse en su país natal.

Adicionalmente, esta novela gráfica plantea que la problemática de los nuevos de la clase implica empezar desde cero, con profundos dolores y sentimientos de incertidumbre a los que saben que deben ignorar porque el deber de adaptación, así como hambre, no da espera, pues el peso de la adaptación se hace menos llevadero con las actitudes de indiferencia y malos tratos que a diario reciben por parte de los nacidos en este país.

Tomado de Parra, N. (2019). Consultado el 4 de noviembre de 2024.

En definitiva, la autora expone que, al pensar en la situación que viven los nuevos de la clase, se abre la puerta de la evocación hacia situaciones propias y por tanto entender en cierta medida todo lo que implica ser el o la nueva de la clase. Sin embargo, ello conlleva a la respuesta natural del ser humano que puede direccionar hacia dos acciones opuestas: La primera es tratar el tema con empatía (lo deseable); y la segunda, actuar con indiferencia o irrespeto. Al respecto, De Lucas (2002) menciona que «la condición de ser migrante no justifica, ni es una razón para algún tipo de discriminación». Es por ello que la novela gráfica «Nido» de la escritora colombo-venezolana Laura Guarisco, propone una herramienta de inspiración, respeto y solidaridad para todos aquellos que a diario deben enfrentar de manera directa o indirecta la situación migratoria del país.

Fuente: HacheComics (2024).

Referencias